FILOSOFÍA GRADO 10°: "PLATÓN Y EL MUNDO DE LAS IDEAS" Apreciados estudiantes.
Comenzamos con un nuevo tema, no sin antes decirles que el pensamiento de los filósofos griegos es un tema tan amplio que abarcarlo en pocas clases es muy complejo, solo se alcanza a tener algunas ideas sobre los aportes al pensamiento y su influencia para la reflexión actual.
En este tema nuevo nos encontramos con Platón, quien fuera uno de los grandes discípulos de Sócrates y quien lo dio a conocer a través de sus famosos diálogos platónicos. Él profundizó, como su maestro, en los problemas del ser humano y la constitución esencial del mundo.
FASE DE EXPLORACIÓN
Antes de comenzar con el tema, conviene resolver el siguiente interrogante:
¿Qué piensa usted acerca de la muerte? Argumente tu respuesta.
¿Crees qué el concepto de alma es lo mismo que el concepto de espíritu? Argumente tu respuesta.
¿Qué consideras que pasa cuando una persona fallece, desaparecerá por completo o su alma sigue perdurando?
¿Qué considera que es más importante dentro del ser humano, el cuerpo o el alma? Explica tu respuesta.
¿De dónde provendrá el conocimiento, del cuerpo o del alma? Explica tu respuesta.
¿Cuál es el valor que le da usted a su alma y de qué manera lo manifiesta? Explique
¿Cuál es el valor que le da a su cuerpo y de que manera lo manifiesta?
¿Qué es más importante para usted, el cuerpo o el alma? Argumente su respuesta?
Hagamos un recorrido por la vida de éste interesante personaje...
Luego de ver loa vídeos, realice en el cuaderno el mapa conceptual y escriba el contenido presente en los cuadros siguientes:
PLATÓN
(Atenas, 427 - 347 a. C.) Filósofo griego. Junto con su
maestro Sócrates y su discípulo Aristóteles, Platón es la figura central de los
tres grandes pensadores en que se asienta toda la tradición filosófica europea.
Fue el británico Alfred North Whitehead quien subrayó su importancia afirmando
que el pensamiento occidental no es más que una serie de comentarios a pie de
página de los diálogos de Platón.
Platón tuvo una educación esmerada en todos los ámbitos del
conocimiento. Es posible que se iniciara en la filosofía con las enseñanzas del
heracliteano Cratilo. A los veinte años (407) tiene lugar el encuentro con
Sócrates: acontecimiento decisivo para Platón. Sócrates contaba entonces 63
años y se convertirá en su único maestro hasta su muerte. Tanto por sus
relaciones familiares, como por vocación, Platón tuvo la intención de
adentrarse en la vida política.
La circunstancia de que Sócrates no dejase obra escrita,
junto al hecho de que Aristóteles construyese un sistema opuesto en muchos
aspectos al de su maestro, explican en parte la rotundidad de una afirmación
que puede parecer exagerada.
En cualquier caso, es innegable que la obra de
Platón, radicalmente novedosa en su elaboración lógica y literaria, estableció
una serie de constantes y problemas que marcaron el pensamiento occidental más
allá de su influencia inmediata, que se dejaría sentir tanto entre los paganos
(el neoplatonismo de Plotino) como en la teología cristiana, fundamentada en
gran medida por San Agustín sobre la filosofía platónica.
Nacido en el seno de una familia aristocrática, Platón
abandonó su inicial vocación política y sus aficiones literarias por la
filosofía, atraído por Sócrates: fue su discípulo desde los veinte años y se
enfrentó abiertamente a los sofistas (Protágoras, Gorgias). Tras la condena a
muerte de Sócrates (399 a. C.), huyó de Atenas y se apartó completamente de la
vida pública; no obstante, los temas políticos ocuparon siempre un lugar
central en su pensamiento, y llegó a concebir un modelo ideal de Estado.
Su filosofía es un dualismo que afecta tanto al análisis de
la realidad, ya que existen dos mundos (uno sensible y otro accesible por la
inteligencia, es decir, un mundo tangible y un mundo de las ideas(intangible).
El mismo modelo se aplica a la virtud, que consiste en alejarse de lo sensual y
alcanzar el mundo de las ideas, y su teoría política, que defiende que los
filósofos deben gobernar porque solo ellos han accedido al mundo inteligible y,
por ello, conocen el bien y pueden implantar la justicia en la polis (Polis
es la denominación dada a las ciudades-estado o ciudades independientes de la
antigua Grecia).
LA OBRA PLATÓNICA
La mayor parte de la obra de Platón está escrita en forma de
diálogo. Son diálogos en los que aparece Sócrates como uno de los
interlocutores y en los que se trata de esclarecer algún concepto (el bien, la
justicia, la belleza...). No componen un corpus homogéneo, su filosofía pasa
por diferentes etapas, siempre en constante búsqueda (mediante la palabra) de
la verdad:
"Aquel que conozca qué es el bien obrará bien, porque esto es lo más provechoso para el individuo y
el bien coincide con lo útil"
Teoría del conocimiento
Establece que la opinión sensible
es apariencia ilusoria y falaz y corresponde a los fenómenos, en cambio, la
verdadera realidad es lo que corresponde al conocimiento verdadero, o sea al
conocimiento de las esencias o tipos universales o ideas. Estás corresponden a
su vez al mundo de las ideas, al mundo suprasensible, y aquellas al mundo
sensible, material y terráqueo.
He aquí
el idealismo platónico, que convierte la antítesis entre los fenómenos y las
sustancias (o sea entre los datos de la sensibilidad y exigencias del
intelecto) sobre el cual, desde Tales en adelante giraba toda la metafísica
griega, en dualismo o separación de DOS MUNDOS: Las ideas constituyen el mundo
eterno de la realidad, separado del mundo de las cosas, al cual debemos llegar
si es que es realmentequeremos obtener
un verdadero conocimiento.
La teoría de la reminiscencia:
Platón dice que el alma puede
buscar y encontrar las ideas porque las ha contemplado en el mundo de la verdad
eterna antes de entrar en el cuerpo. Este se convierte en una pesada carga para
aquella, es como una cárcel, una prisión. Cuando en el mundo material el alma
aprehende las cosas simplemente lo que hace es recordar o recuperar aquello que
permanecía oculto en el alma. Pero este mito de la contemplación de las ideas
anterior al nacimiento quiere significar, esencialmente que el alma, por su
naturaleza divina e inmortal, tiene una capacidad innata para extraer de su
interioridad, mediante el esfuerzo y la actividad intelectual, el conocimiento
de las ideas eternas, y constituir así la ciencia del ser verdadero.
En síntesis las cosas sensibles son las que despiertan en
nosotros el recuerdo de las ideas, porque son como sombras de ellas, sombras
más allá de las cuelas no sabe ir quién permanece prisionero de la percepción
sensible, enterrado en el cuerpo como en una oscura caverna, pero detrás de las
cuales el filósofo ve la realidad y la luz del mundo ideal.
A la dialéctica, o
ciencia de las ideas, le corresponde distinguir cuáles concuerdan entre ellas y
cuáles se excluyen, cuáles unen y cuáles dividen. Las ideas más importantes
para Platón son cinco: El ser, el reposo, el movimiento, lo idéntico y distinto.
Pero la suprema entre todas es la idea del Bien, Sol del mundo ideal, que
difunde sobre todas las otras su luz y su calor, dando ser y verdad a lo
conocido y capacidad intelectiva al cognoscente.
En los últimos años, Platón, volviendo sentir en medida
creciente la influencia de los pitagóricos, identifica las ideas con los
números. No los números matemáticos (que los pitagóricos consideraban esencia
delas cosas) sino los números ideales,
que trascienden las cosas sensibles.
La creación del mundo:
Dios y la materia. El bien constituye
la naturaleza misma de Dios (al que Platón llamó el Demiurgo), que es creador y
ordenador del mundo, conformado por él a imitación de un modelo eterno. El bien
no puede ser causa del mal: existe entonces una concausa, que se le opone y
resiste, es decir, la materia, fuente de todo defecto, mutabilidad y
multiplicidad. Así la causa física (materia) resiste a la causa final (alma del
mundo e ideas), y por eso las cosas no pueden ser sino copias imperfectas de
las ideas, sombras de su esplendor.
El hombre:
El alma inmortal, sus partes y su destino. El
hombre que es la unión del cuerpo y del alma, tiene su verdadera esencia en
ésta, que es de naturaleza idéntica a la de las ideas (simples, indivisibles,
inmutables e inmortales).
El alma se ha dividido según Platón en tres facultades: El
alma racional (ubicada en la cabeza), el alma pasional (pecho) y el alma
apetitiva (vientre).
La función ética del estado.
El estado debe procurar el
mayor bien de los ciudadanos; pero no un bien material, de comodidades y de
goces, estímulo a la avidez, intemperancia e injusticia, sino más bien y sobre
todo, el bien espiritual. Y por eso se debe mantener en el estado ese mismo
orden jerárquico que es necesaria en el alma individual, a cuya semejanza la
sociedad también se distingue en tres partes o clases, teniendo cada una, una
índole, función o norma ideal o virtud propia.
Las tres clases y las virtudes.
Son las tres clases sociales
en las que se divide el estado: Los filosóficos, cuya virtud es la sabiduría;
Los guerreros, cuya virtud es el coraje; los trabajadores manuales y
comerciantes, cuya virtud es la templanza.si cada una de estas tres clases cumple con su cometido, y ninguna
invade el campo de las otras, ni altera las relaciones de subordinación, la
justicia reinará. Y en lo que respecta a la educación, esta debe ser sólo para
las dos primeras clases sociales. La crianza y la educación son gobernadas por
el estado.
PLATÓN Y EL MITO DE LA CAVERNA
El mito de la caverna de Platón es una alegoría sobre la
realidad de nuestro conocimiento. Platón crea el mito de la caverna para
mostrar en sentido figurativo que nos encontramos encadenados dentro de una
caverna, desde que nacemos, y cómo las sombras que vemos reflejadas en la pared
componen aquello que consideramos real.
Observemos con atención el siguiente vídeo y después analizaremos su significado
ACTIVIDAD PRÁCTICA
QUÉ TANTO HE APRENDIDO?
NOTA: es importante ser responsable con el desarrollo de esta actividad práctica y escribir correctamente, de tal forma que se pueda leer con facilidad.
Respondo los siguientes interrogantes.
De acuerdo al texto, que ideas de Platón considera que se mantienen en la actualidad?
Qué importancia tuvo el pensamiento platónico para la religión cristiana?
Qué importancia tuvo para Platón los temas políticos?
¿Por qué se dice que la filosofía de Platón es dualista? Explique.
¿Cuáles son los dos mundos que nos habla Platón? Explique
Explique de qué manera comparaba Platón el alma humana con los caballos blancos y negros, y que papel cumple el ecuestre.
¿Qué es el conocimiento para Platón?
¿Cómo se explica la Teoría de la reminiscencia según Platón?
¿Qué es el hombre para Platón?
Explique las tres clases sociales en las que se divide el estado.
ACTVIDAD EN CLASE Y PARA INICIO DEL TERCER PERIODO
NOTA: esta actividad solo se resuelve en el aula y con orientaciones del docente. De acuerdo al vídeo o lectura del texto sobre el mito de la caverna, señale su importancia y realice un dibujo donde se refleje lo que sería el mito de la caverna hoy. Este dibujo NO puede ser sacado de ninguna página ni fotos de internet, ya que se trata de lo que usted como joven piensa como se puede entender el MITO DE LA CAVERNA HOY (ELDIBUJO DEBE EXPONERSE PARA QUE SEA TENIDA ENCUENTA LA NOTA )
ANEXO DEL TEXTO
MITO DE LA CAVERNA
Platón: el mito de la caverna
--Ahora, continué, imagínate nuestra naturaleza, por lo que se refiere a la ciencia, y a la
ignorancia, mediante la siguiente escena. Imagina unos hombres en una habitación
subterránea en forma de caverna con una gran abertura del lado de la luz. Se encuentran en
ella desde su niñez, sujetos por cadenas que les inmovilizan las piernas y el cuello, de tal
manera que no pueden ni cambiar de sitio ni volver la cabeza, y no ven más que lo que está
delante de ellos. La luz les viene de un fuego encendido a una cierta distancia detrás de
ellos sobre una eminencia del terreno. Entre ese fuego y los prisioneros, hay un camino
elevado, a lo largo del cual debes imaginar un pequeño muro semejante a las barreras que
los ilusionistas levantan entre ellos y los espectadores y por encima de las cuales muestran
sus prodigios.
--Ya lo veo, dijo.
--Piensa ahora que a lo largo de este muro unos hombres llevan objetos de todas clases,
figuras de hombres y de animales de madera o de piedra, v de mil formas distintas, de
manera que aparecen por encima del muro. Y naturalmente entre los hombres que pasan,
unos hablan y otros no dicen nada.
--Es esta una extraña escena y unos extraños prisioneros, dijo.
--Se parecen a nosotros, respondí. Y ante todo, ¿crees que en esta situación verán otra cosa
de sí mismos y de los que están a su lado que unas sombras proyectadas por la luz del fuego
sobre el fondo de la caverna que está frente a ellos.
--No, puesto que se ven forzados a mantener toda su vida la cabeza inmóvil.
--¿Y no ocurre lo mismo con los objetos que pasan por detrás de ellos?
--Sin duda.
--Y si estos hombres pudiesen conversar entre sí, ¿no crees que creerían nombrar a las
cosas en sí nombrando las sombras que ven pasar?
--Necesariamente.
--Y si hubiese un eco que devolviese los sonidos desde el fondo de la prisión, cada vez que
hablase uno de los que pasan, ¿no creerían que oyen hablar a la sombra misma que pasa
ante sus ojos?
--Sí, por Zeus, exclamó.
--En resumen, ¿estos prisioneros no atribuirán realidad más que a estas sombras?
--Es inevitable.
--Supongamos ahora que se les libre de sus cadenas y se les cure de su error; mira lo que
resultaría naturalmente de la nueva situación en que vamos a colocarlos. Liberamos a uno
de estos prisioneros. Le obligamos a levantarse, a volver la cabeza, a andar y a mirar hacia
el lado de la luz: no podrá hacer nada de esto sin sufrir, y el deslumbramiento le impedirá
distinguir los objetos cuyas sombras antes veía. Te pregunto qué podrá responder si alguien
le dice que hasta entonces sólo había contemplado sombras vanas, pero que ahora, más
cerca de la realidad y vuelto hacia objetos más reales, ve con más perfección; y si por
último, mostrándole cada objeto a medida que pasa, se le obligase a fuerza de preguntas a
decir qué es, ¿no crees que se encontrará en un apuro, y que le parecerá más verdadero lo
que veía antes que lo que ahora le muestran?
--Sin duda, dijo.
--Y si se le obliga a mirar la misma luz, ¿no se le dañarían los ojos? ¿No apartará su mirada
de ella para dirigirla a esas sombras que mira sin esfuerzo? ¿No creerá que estas sombras
son realmente más visibles que los objetos que le enseñan?
--Seguramente.
--Y si ahora lo arrancamos de su caverna a viva fuerza y lo llevamos por el sendero áspero
y escarpado hasta la claridad del sol, ¿esta violencia no provocará sus quejas y su cólera? Y
cuando esté ya a pleno sol, deslumbrado por su resplandor, ¿podrá ver alguno de los objetos
que llamamos verdaderos?
--No podrá, al menos los primeros instantes.
--Sus ojos deberán acostumbrarse poco a poco a esta región superior. Lo que más
fácilmente verá al principio serán las sombras, después las imágenes de los hombres y de
los demás objetos reflejadas en las aguas, y por último los objetos mismos. De ahí dirigirá
sus miradas al cielo, y soportará más fácilmente la vista del cielo durante la noche, cuando
contemple la luna y las estrellas, que durante el día el sol y su resplandor.
--Así lo creo.
--Y creo que al fin podrá no sólo ver al sol reflejado en las aguas o en cualquier otra parte,
sino contemplarlo a él mismo en su verdadero asiento.
--Indudablemente.
--Después de esto, poniéndose a pensar, llegará a la conclusión de que el sol produce las
estaciones y los años, lo gobierna todo en el mundo visible y es en cierto modo la causa de
lo que ellos veían en la caverna.
--Es evidente que llegará a esta conclusión siguiendo estos pasos.
--Y al acordarse entonces de su primera habitación y de sus conocimientos allí y de sus
compañeros de cautiverio, ¿no se sentirá feliz por su cambio y no compadecerá a los otros?
Ciertamente.
--Y si en su vida anterior hubiese habido honores, alabanzas, recompensas públicas
establecidas entre ellos para aquel que observase mejor las sombras a su paso, que
recordase mejor en qué orden acostumbran a precederse, a seguirse o a aparecer juntas y
que por ello fuese el más hábil en pronosticar su aparición, ¿crees que el hombre de que
hablamos sentiría nostalgia de estas distinciones, y envidiaría a los más señalados por sus
honores o autoridad entre sus compañeros de cautiverio? ¿.No crees más bien que será
como el héroe de Homero y preferirá mil veces no ser más «que un mozo de labranza al
servicio de un pobre campesino» y sufrir todos los males posibles antes que volver a su
primera ilusión y vivir como vivía?
--No dudo que estaría dispuesto a sufrirlo todo antes que vivir como anteriormente.
--Imagina ahora que este hombre vuelva a la caverna y se siente en su antiguo lugar. ¿No se
le quedarían los ojos como cegados por este paso súbito a la obscuridad?
--Sí, no hay duda.
--Y si, mientras su vista aún está confusa, antes de que sus ojos se hayan acomodado de
nuevo a la obscuridad, tuviese que dar su opinión sobre estas sombras y discutir sobre ellas
con sus compañeros que no han abandonado el cautiverio, ¿no les daría que reír? ¿No dirán
que por haber subido al exterior ha perdido la vista, y no vale la pena intentar la ascensión?
Y si alguien intentase desatarlos y llevarlos allí, ¿no lo matarían, si pudiesen cogerlo y
matarlo?
--Es muy probable.
--Ésta es precisamente, mi querido Glaucón, la imagen de nuestra condición. La caverna
subterránea es el mundo visible. El fuego que la ilumina, es la luz del sol. Este prisionero
que sube a la región superior y contempla sus maravillas, es el alma que se eleva al mundo
inteligible. Esto es lo que yo pienso, ya que quieres conocerlo; sólo Dios sabe si es verdad.
En todo caso, yo creo que en los últimos límites del mundo inteligible está la idea del bien,
que percibimos con dificultad, pero que no podemos contemplar sin concluir que ella es la
causa de todo lo bello y bueno que existe. Que en el mundo visible es ella la que produce la
luz y el astro de la que procede. Que en el mundo inteligible es ella también la que produce
la verdad y la inteligencia. Y por último que es necesario mantener los ojos fijos en esta
idea para conducirse con sabiduría, tanto en la vida privada como en la pública. Yo también
lo veo de esta manera, dijo, hasta el punto de que puedo seguirte. [. . .]
--Por tanto, si todo esto es verdadero, dije yo, hemos de llegar a la conclusión de que la
ciencia no se aprende del modo que algunos pretenden. Afirman que pueden hacerla entrar
en el alma en donde no está, casi lo mismo que si diesen la vista a unos ojos ciegos.
--Así dicen, en efecto, dijo Glaucón.
--Ahora bien, lo que hemos dicho supone al contrario que toda alma posee la facultad de
aprender, un órgano de la ciencia; y que, como unos ojos que no pudiesen volverse hacia la
luz si no girase también el cuerpo entero, el órgano de la inteligencia debe volverse con el
alma entera desde la visión de lo que nace hasta la contemplación de lo que es y lo que hay
más luminoso en el ser; y a esto hemos llamado el bien, ¿no es así?
--Sí.
--Todo el arte, continué, consiste pues en buscar la manera más fácil y eficaz con que el
alma pueda realizar la conversión que debe hacer. No se trata de darle la facultad de ver, ya
la tiene. Pero su órgano no está dirigido en la buena dirección, no mira hacia donde debiera:
esto es lo que se debe corregir.
-Así parece, dijo Glaucón.
_______________________________________-___________
República Vll; 514a_517c y 518b_d. (R. Verneaux, Textos de los grandes filósofos. Edad
antigua, Herder, Barcelona 1982, p. 26-30).
Luego de haber reflexionado un poco de nuestro acontecimiento actual y de buscar respuestas sencillas a nuestra existencia, los invito a que conozcamos un poco sobre la manera como algunos filósofos griegos se preguntaron por el ser humano y su sentido de vivir.
Pero... ¿Será verdad que el ser humano está compuesto de cuerpo y alma? ¿Qué sentido tiene el comportarnos bien si de todas maneras vamos a morir? ¿y de dónde diablos salieron con la idea de lo bueno y lo malo? ¿ y eso quién lo inventó y para qué?
FASE DE EXPLORACIÓN
Para esta fase conviene que escribamos en el cuaderno las siguientes
preguntas seguidas con sus respectivas respuestas.
1. ¿Qué consideras que es el
ser humano? Argumenta tu respuesta.
2. ¿Qué importancia cree que tiene el hacernos preguntas?. Argumenta tu respuesta.
3. ¿Qué diferencia encuentras entre el actuar del hombre y el animal?
4. ¿Qué es aquello que llamamos alma? Escribe tu respuesta.
5. ¿Qué es para ti la verdad?
6. ¿Tú crees que es posible llegar a una verdad absoluta? Argumenta tu respuesta.
7. ¿Puede la inteligencia artificial reemplazar todos los conocimientos del hombre? Argumenta su respuesta.
8. ¿Qué aspectos del ser humano cree usted que la inteligencia artificial no podría remplazar? Argumenta su respuesta.
NO OLVIDES: DE LA RESPONSABILIDAD EN EL DESARROLLO DE LAS ACTIVIDADES
DEPENDE SI ADQUIERE O NO CONOCIMIENTO.
Luego de observar el vídeo, profundizamos su contenido con la siguiente lectura presentes en estos cuadros y los consignamos en el cuaderno.
DESARROLLO DEL TEMA
I.SOCRATES (469 –
399)
(Atenas, 470 a.C. - 399 a.C) Filósofo griego. Pese a que no
dejó ninguna obra escrita y son escasas las ideas que pueden atribuírsele con
seguridad, Sócrates es una figura capital del pensamiento antiguo, hasta el
punto de ser llamados presocráticos los filósofos anteriores a él.
Rompiendo con las orientaciones predominantes anteriores, su
reflexión se centró en el ser humano, particularmente en la ética, y sus ideas
pasaron a los dos grandes pilares sobre los que se asienta la historia de la
filosofía occidental: Platón, que fue discípulo directo suyo, y Aristóteles,
que lo fue a su vez de Platón.
Sócrates fue hijo de una comadrona, Faenarete, y de un
escultor, Sofronisco, emparentado con Arístides el Justo. Pocas cosas se
conocen con certeza de la biografía de Sócrates, aparte de que participó como
soldado de infantería en las batallas de Samos (440), Potidea (432), Delio
(424) y Anfípolis (422). Fue amigo de Aritias y de Alcibíades, al que salvó la
vida.
La mayor parte de
cuanto se sabe sobre él procede de tres contemporáneos suyos: el historiador
Jenofonte, el comediógrafo Aristófanes y el filósofo Platón. El primero retrató
a Sócrates como un sabio absorbido por la idea de identificar el conocimiento y
la virtud, pero con una personalidad en la que no faltaban algunos rasgos un
tanto vulgares. Aristófanes lo hizo objeto de sus sátiras en una comedia, Las
nubes (423), donde se le identifica con los demás sofistas y es caricaturizado
como engañoso artista del discurso.
Estos dos testimonios matizan la imagen de Sócrates ofrecida
por Platón en sus Diálogos, en los que aparece como figura principal, una
imagen que no deja de ser en ocasiones excesivamente idealizada, aun cuando se
considera que posiblemente sea la más justa.
Se tiene por cierto que Sócrates se casó, a una edad algo
avanzada, con Xantipa, quien le dio dos hijas y un hijo. Cierta tradición ha
perpetuado el tópico de la esposa despectiva ante la actividad del marido y
propensa a comportarse de una manera brutal y soez. En cuanto a su apariencia,
siempre se describe a Sócrates como un hombre rechoncho, con un vientre
prominente, ojos saltones y labios gruesos, del mismo modo que se le atribuye
también un aspecto desaliñado.
La mayéutica
Al parecer, y durante buena parte de su vida, Sócrates se
habría dedicado a deambular por las plazas y los mercados de Atenas, donde
tomaba a las gentes del común (mercaderes, campesinos o artesanos) como
interlocutores para sostener largas conversaciones, con frecuencia parecidas a
largos interrogatorios. Este comportamiento correspondía, sin embargo, a la
esencia de su sistema de enseñanza, la mayéutica.
Con el siguiente vídeo podemos comprender mejor el concepto de la mayéutica.
El propio Sócrates comparaba tal método con el oficio de
comadrona que ejerció su madre: se trataba de llevar a un interlocutor a
alumbrar la verdad, a descubrirla por sí mismo como alojada ya en su alma, por
medio de un diálogo en el que el filósofo proponía una serie de preguntas y
oponía sus reparos a las respuestas recibidas, de modo que al final fuera
posible reconocer si las opiniones iniciales de su interlocutor eran una apariencia
engañosa o un verdadero conocimiento.
En sus conversaciones filosóficas, al menos tal y como
quedaron reflejadas en los Diálogos de Platón, Sócrates sigue, en efecto, una
serie de pautas precisas que configuran el llamado diálogo socrático. A menudo
comienza la conversación alabando la sabiduría de su interlocutor y
presentándose a sí mismo como un ignorante: tal fingimiento es la llamada
ironía socrática, que preside la primera mitad del diálogo. En ella, Sócrates
proponía una cuestión (por ejemplo, ¿qué es la virtud?) y alababa la respuesta
del interlocutor, pero luego oponía con sucesivas preguntas o contraejemplos
sus reparos a las respuestas recibidas, sumiendo en la confusión a su
interlocutor, que acababa reconociendo que no sabía nada sobre la cuestión.
Tal logro era un punto esencial: no puede enseñarse algo a
quien ya cree saberlo. El primer paso para llegar a la sabiduría es saber que
no se sabe nada, o, dicho de otro modo, tomar conciencia de nuestro
desconocimiento. Una vez admitida la propia ignorancia, comenzaba la mayéutica
propiamente dicha: por medio del diálogo, con nuevas preguntas y razonamientos,
Sócrates iba conduciendo a sus interlocutores al descubrimiento (o
alumbramiento) de una respuesta precisa a la cuestión planteada, de modo tan
sutil que la verdad parecía surgir de su mismo interior, como un descubrimiento
propio.
La filosofía de Sócrates
La cuestión moral del conocimiento del bien estuvo en el
centro de las enseñanzas de Sócrates, con lo que imprimió un giro fundamental
en la historia de la filosofía griega, al prescindir de las preocupaciones
cosmológicas de sus predecesores. Como se ha visto, el primer paso para
alcanzar el conocimiento consistía en la aceptación de la propia ignorancia, y
en el terreno de sus reflexiones éticas, el conocimiento juega un papel
fundamental.
Sócrates piensa que el hombre no puede hacer el bien si no
lo conoce, es decir, si no posee el concepto del mismo y los criterios que
permiten discernirlo.
El ser humano aspira a la felicidad, y hacia ello encamina
sus acciones. Sólo una conducta virtuosa, por otra parte, proporciona la
felicidad. Y de entre todas las virtudes, la más importante es la sabiduría,
que incluye a las restantes.
El que posee la sabiduría posee todas las virtudes porque,
según Sócrates, nadie obra mal a sabiendas: si, por ejemplo, alguien engaña al
prójimo es porque, en su ignorancia, no se da cuenta de que el engaño es un
mal. El sabio conoce que la honestidad es un bien, porque los beneficios que le
reporta (confianza, reputación, estima, honorabilidad) son muy superiores a los
que puede reportarle el engaño (riquezas, poder, un matrimonio conveniente).
El ignorante no se da cuenta de ello: si lo supiese,
cultivaría la honestidad y no el engaño. En consecuencia, el hombre sabio es
necesariamente virtuoso (pues conocer el bien y practicarlo es, para Sócrates,
una misma cosa), y el hombre ignorante es necesariamente vicioso. De esta
concepción es preciso destacar que la virtud no es algo innato que surge
espontáneamente en ciertos hombres, mientras que otros carecen de ella. Todo lo
contrario: puesto que la sabiduría contiene las demás virtudes, la virtud puede
aprenderse; mediante el entendimiento podemos alcanzar la sabiduría, y con ella
la virtud.
Sin embargo, en los Diálogos de Platón resulta difícil
distinguir cuál es la parte de lo expuesto que corresponde al Sócrates
histórico y cuál pertenece ya a la filosofía de su discípulo. Sócrates no dejó
doctrina escrita, ni tampoco se ausentó de Atenas (salvo para servir como
soldado), contra la costumbre de no pocos filósofos de la época, y en especial
de los sofistas. Si, como parece, las ideas éticas antes expuestas son del
propio Sócrates, su filosofía se sitúa en la antípodas del escepticismo y del
relativismo moral de los sofistas, pese a lo cual, y a causa de su pericia
dialéctica, fue considerado en su tiempo como uno de ellos, tal y como refleja
la citada comedia de Aristofánes.
Con su conducta, Sócrates se granjeó enemigos que, en el
contexto de inestabilidad en que se hallaba Atenas tras las guerras del
Peloponeso, acabaron por considerar que su amistad era peligrosa para
aristócratas como sus discípulos Alcibíades o Critias; oficialmente acusado de
impiedad y de corromper a la juventud, fue condenado a beber cicuta después de
que, en su defensa, hubiera demostrado la inconsistencia de los cargos que se
le imputaban.
Según relata Platón en la Apología que dejó de su maestro,
Sócrates pudo haber eludido la condena, gracias a los amigos que aún
conservaba, pero prefirió acatarla y morir, pues como ciudadano se sentía
obligado a cumplir la ley de la ciudad, aunque en algún caso, como el suyo,
fuera injusta; peor habría sido la ausencia de ley.
Escuelas Socráticas
En el 399, a la muerte de Sócrates sus discípulos se
dispersar y algunos de ellos fundaron escuelas filosóficas. Ninguna de ellas
representa el genuino pensamiento de Sócrates sino que desarrollan con
autonomía algunos de los temas cuyo tratamiento iniciara el maestro a lo que
agregarían numerosos elementos tomados de los sofistas e incluso de los
filósofos presocráticos.
La Academia – Platón
Fundada por Platón, discípulo de Sócrates, esta escuela se centró en la exploración de la metafísica, la epistemología y la ética. Platón desarrolló la teoría de las Formas o Ideas, que sostiene que las cosas que percibimos en el mundo sensible son solo copias imperfectas de las Formas perfectas e inmutables que existen en el reino de las Ideas. La Academia fue un centro de investigación y enseñanza que continuó después de la muerte de Platón.
Se desarrollan en La Academia, los aspectos científicos y
psicológicos de la doctrina socrática. Platón elabora su propia doctrina de las
Ideas a partir de la búsqueda socrática de la definición y el concepto. E
inspirándose también en Pitágoras profundizará el tema del alma.
·Escuela Margárica:
(Euclides de Megara) 452 – 380 a.c.
Continúa las doctrinas de Parménides y Zenón de Elea, con
algunas modificaciones que fueron sugeridas a Euclides tras el contacto con
Sócrates.
Euclides identifica el Ser con el Bien y con Dios (es
posible que Sócrates haya defendido alguna suerte de monoteísmo) y considera
que todas las virtudes se reducen a una sola, pero designada con distintos
nombres (doctrina que también se remonta a Sócrates).
Estilpón, uno de los continuadores de Sócrates, atacó la
doctrina platónica de las Ideas, afirmando que sólo existe lo singular actual y
negando la existencia de los géneros y las especies universales. Su ética
influirá en la aparición del estoicismo, puesto que aparentemente Zenón de
Citio fue discípulo suyo.
·Escuela de Elis y Eretría:
Fue iniciada por Fedón, esclavo
que alcanzó la libertad gracias a Sócrates. Se considera la Filosofía el camino
hacia la verdadera libertad y la salud del alma.
·Escuela Cínica:
Nada hay valioso en el mundo fuera de la
virtud, ella Solo se basta. “Antes loco que ceder al placer” (Antístenes).
Lo
anterior conduce también a un desprecio general de cultura, del pudor y de las
costumbres, de la ciencia, de la religión, de los lazos civiles y nacionales.
De ahí que el actual concepto de “cínico” significa que es desaprehensivo e
insensible a las conveniencias sociales hasta la grosería.
El ideal del cínico
está constituido por una vida capaz de bastarse a sí misma, ruda y libre de
necesidades,que repudia todo artificio
y convención social para volver a la naturaleza. Entre sus principales
exponentes está DIOGENES DE SINOPE.
Diógenes de Sinope fue el más claro exponente de la actitud
de los cínicos: atacó los convencionalismos sociales, buscó lo natural en la
vida de los animales, los pueblos bárbaros y fue absolutamente
independiente.La escuela cínica, con
diversas idas y venidas que la llevaron en algún momento a confundirse con el
estoicismo, perduró hasta la caída del Imperio Romano.
La principal característica de este filósofo, nacido en
Sínope y famoso en Atenas, fue su enorme desprendimiento. Amaba la libertad por
encima de todo y no temía decir la verdad a los poderosos. Se decía de él que
vivía en un tonel y muchos lo confundían con un mendigo.
Estas son algunas de las más conocidas frases de Diógenes,
el cínico.
El insulto deshonra a quien lo infiere, no a quien lo
recibe.
El único bien es el conocimiento, y el único mal la
ignorancia.
Cuando estoy entre locos, me hago el loco.
¿De qué sirve un filósofo que no hiere los sentimientos de
nadie?
Si tú aprendieras a comer lentejas no tendrías que ser
sumiso y adular tanto al emperador.
“Callando es como se aprende a oír, escuchando es como se
aprende a hablar; después, hablando, se aprende a callar”.
La envidia es causada por ver a otro gozar de lo que
deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros.
En dirección diametralmente opuesta se encuentra la:
·Escuela Cirenaica:
(Aristípo de Cirene): Impera el
hedonismo (búsqueda del placer) . El valor hay que buscarlo exclusivamente en
el placer y concretamente el que se percibe en la impresión sensible, no en las
ideas y conceptos.
Aristipo, discípulo de Protágoras y luego de Sócrates es el
más claro representante de la moral del hedonismo. No hay más fuente de
conocimiento que la sensación y ésta solo posee un valor subjetivo (relativismo
de Protágoras).
La sensación es pues, la única guía del hombre. El fin de
toda moral es el de buscar sensaciones agradables, actuales y principalmente
corporales. La razón, sin embargo (y aquí se observa el sello de Sócrates) debe
dirigir al hombre en la elección de tales placeres.
Por su rechazo a todo tipo de convencionalismo social, la
escuela de Cirene está bastante cerca de la escuela cínica.
Respondo los siguientes interrogantes.
1. Seleccione 10 palabras desconocidas del texto y escriba su significado.
2. En pocas palabras, señale los aspectos más destacados de la vida de Sócrates, según el vídeo visto.
3. ¿En qué consiste el método socrático? De un ejemplo.
4. ¿Qué es la Mayéutica y qué importancia posee para el conocimiento?
5. ¿Establezca la diferencia entre la mayéutica y la ironía socrática?
6. ¿Cuál es el primer paso para llegar al conocimiento, según Sócrates?
7. Según Sócrates, que ventajas posee la virtud y cómo el ser humano puede llegar a ella?
8. ¿Cuáles son los principales principios de la escuela Cínica?
9. Selecciono DOS de las frases citadas de Diógenes y señalo el por qué la elegí.